De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), 15 millones de personas sufren un ACV por año. De esos, más de 6 millones mueren, y el resto queda con una discapacidad permanente. En el mundo, es la segunda causa de muerte y la primera de discapacidad.
¿Qué es un ACV?
Es una enfermedad cerebrovascular que afecta los vasos sanguíneos que suministran sangre al cerebro alterando las funciones de determinadas regiones.
Puede ser causada por la súbita pérdida de flujo sanguíneo cerebral (ACV isquémico) o por un sangrado dentro de la cabeza (AVC hemorrágico).
Síntomas que alertan la aparición de un ACV
¿Cómo reconocer los síntomas de ACV en un tercero?
Pedirle a la persona que sonría. Si al hacerlo, un lado de su rostro o boca está caído, es una señal de ataque.
Solicitarle que eleve los dos brazos y sostenga. Si uno de los dos cae lentamente, hay probabilidad de ACV
Haga que la persona repita una frase simple. Si arrastra la voz o habla raro es otro signo.
¿Qué hacer?
Si la persona padece uno o todos los síntomas será necesario seguir los siguientes pasos:
- Inmediatamente llevarla a un centro asistencial. Servicio de alta complejidad.
- En caso de no poder trasladarla, llamar a un servicio de emergencias.
- No suministrarle ningún tipo de medicación.
- Recordar la hora de comienzo de los síntomas.
IMPORTANTE:
Aún si los síntomas desaparecen de sebe llamar de inmediato al servicio de emergencias.
El cerebro tiene aproximadamente 120 millones de neuronas y en situación de ACV se pierden casi 2 millones de neuronas por minuto.
El reconocimiento temprano de los síntomas y la atención médica inmediata pueden reducir considerablemente las posibilidades de muerte o discapacidad.
El 90% de los ACV se asocian a factores de riesgo que son controlables y tratables: hipertensión arterial, colesterol elevado, diabetes, sedentarismo, obesidad, mala alimentación, tabaquismo, alcoholismo y fibrilación auricular, entre otros.
Es necesario e imprescindible conocer y aprender a identificar los síntomas de un ACV.